LUKAH BOO es el proyecto en solitario de Tony Sáez, cantante de THE HAPPY LOSERS y uno de los secretos mejor guardados del pop nacional. Tras bastante tiempo dando salida a su exhuberante creatividad e hiperactividad musical componiendo y grabando canciones en su estudio casero, actualmente se encuentra grabando lo que será su primer álbum. El propio LUKAH BOO describe sus influencias: “Beatles, Brian Wilson, The happy losers, The Zombies, Teenage Fanclub, Popsicle, The Pearlfishers, The Heavy Blinkers, Vonnegut, Wilco, Ron Sexmith, Jayhawks, Rufus Wainwright, Sufjan Stevens, Velvet Crush, Honeybus, Pio Baroja, Nick Hornby, World Party, Lawrence Durrell, Philp K. Dick, Boo Radleys, Dodgy, Rubin, Cosmic Rough Ryders, ...” POP es estado puro y grandes canciones es su propuesta.
Nick Garrie ha vivido durante décadas a la sombra de grandes figuras como Donovan o Nick Drake, sin que su nombre fuera más allá de los círculos más estrictamente eruditos en el ámbito del folk-rock de corte psicodélico que floreció en el Reino Unido entre finales de la década de los 60 y principios de los 70, y que ahora resurge a raíz de su redescubrimiento en el otro lado del charco. Pero lo cierto es que Nick Garrie también estuvo allí con unas canciones que tenían forma de hits en potencia. Sin embargo, circunstancias como la mala suerte o las habituales injusticias de un negocio como el discográfico evitaron que fueran más allá de un selecto reducto. Aún así, cuatro décadas después Garrie sigue siendo venerado por los aficionados al género. Y no solamente eso: nuevas generaciones de músicos le reivindican como influencia y parece ser que hay un nuevo interés en su obra.
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